martes, enero 31, 2006
Imitar a Cristo en su resurrección que vence a la muerte
“... imita a Cristo en tu conducta, de modo, que a la manera que Él resucitó de entre los muertos, así resucites tú a una vida santa e inmaculada. Resucita por medio de las frecuentes confesiones, de actos de arrepentimiento, y de fervientísimos actos de amor a Dios: resucita de todo pecado mortal, de todo pecado venial, y aun de toda imperfección: resucita de modo que nunca jamás vuelvas a morir, y resucita, en fin, llevando una vida perfecta, para que al modo que Jesucristo recibas la eterna recompensa de la gloria”.
Tomado del libro: El credo, c. 7, n. 35.