jueves, febrero 02, 2006
Amar a la Santísima Trinidad
“El Espíritu Santo es el amor sustancial del Padre y del Hijo; y todo lo dirige a su mayor honra y gloria, porque todo lo hace en fuerza del amor. Lector carísimo, amemos, si, amemos a Dios, amémoslo con todo nuestro corazón y con todas nuestras fuerzas; amémoslo por toda nuestra vida y por toda una eternidad: amemos al Padre que nos criado, al Hijo que nos ha redimido, y al Espíritu Santo que nos ha santificado. Feliz tú, mil veces feliz, si acabas tú amando al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, porque gozará un día sus eternas delicias en la patria celestial”.
Tomado del libro: El credo, c. 10, n. 50.